Mizuho Kusanagi (草凪 みずほ) nació un 3 de febrero de 1979, en la prefectura de Kumamoto. Un año en el que también nació otra autora shōjo, Minami Kanan (autora de Honey x Honey), y región de donde también procede Eiichirō Oda (autor de One Piece). Esta mangaka debutó como autora de doujinshis, especialmente yaoi, en 1999. Pero no fue hasta el 2003 cuando comenzó su carrera con la obra Yoiko no Kokoroe (よいこの心得), protagonizada por un gángster adolescente y un consejo de estudiantes con chicos atractivos. Asimismo, esta mangaka, de signo acuario y apasionada del ramen, debutó entre otras de sus obras tenemos los shōjo: Mugen Spiral (夢幻スパイラル) de 2004, Game x Rush (ゲーム×ラッシュ) de 2005, y No Good Life, NG Raifu (NGライフ; エヌジーライフ) de 2006. Finalmente, Yona, princesa del amanecer (暁のヨナ) debutó en 2009, con Hakusensha, llegando a España con Norma Editorial, con anuncio de su licencia en el XXIII Salón del Manga de Barcelona (año 2017).
Seguidamente reproducimos la entrevista a la autora que se realizó en conjunto entre varios medios durante el pasado 25 Manga Barcelona, que tuvo lugar del 31 de octubre al 3 de noviembre de 2019.
Entrevista a Mizuho Kusanagi
P: ¿Hay alguna obra en especial que haya influenciado el manga Yona, princesa del amanecer? ¿Quizá le ha inspirado alguna película o canción?
R: Seguramente he recibido influencias de muchas obras, especialmente las películas de Hayao Miyazaki. Si hablamos de manga, Saint Seiya. Y sí, de algunas cosa que escucho o veo, tomo esos detalles para crear mis propias ideas.
P: Este año se cumple el 10.º aniversario de Yona, princesa del amanecer. Antes de alcanzar 30 tomos recopilatorios y el apoyo por los lectores, ¿pensó que la obra sería tan larga y tendría tanto éxito?
R: No me esperaba que acabase siendo tan larga. En Japón las series cuanto más populares son, más largas se hacen; cuando empiezan a perder éxito, se acaban. Mi intención era hacer algo interesante con esta historia, y al final me ha salido una serie larga.
P: Los personajes y la trama de Yona, princesa del amanecer han evolucionado mucho, y quizá Yona ha tomado un carácter más oscuro. ¿Usted qué opina de esto?
R: Yo no lo veo así. Su etapa más oscura estaba en el palacio, encerrada. Su carácter evoluciona precisamente al salir de allí, al tener muchos compañeros y haber aprendido muchas cosas.
P: ¿Cuándo decidió que quería ser mangaka? ¿Cuáles fueron sus referencias?
R: A los 9 o 10 años, más o menos, empezó todo. Cuando era pequeña me gustaba crear historias y dibujar. Quería ser mangaka, solo tenía una opción: ser mangaka [risas].
P: ¿Cuál es su ritmo de trabajo y cómo diseña las páginas para Yona, princesa del amanecer?
R: Más o menos hago unas 30 páginas en tres días (alrededor de un episodio), junto a mi equipo de asistentes. Pero es diferente cuando escribo y cuando dibujo. Cuando escribo la historia o el guion, hago otras cosas, como comer. Pero cuando dibujo, me centro solo en dibujar. Normalmente trabajo todo el tiempo, no salgo mucho.
P: ¿Qué material usa habitualmente para dibujar?
R: Uso la tinta suisai (水彩) para hacer las portadas a color, y para los bocadillos de las viñetas uso la tinta bokujû (墨汁), también conocida como tinta china.
P: ¿Cómo cree que habría sido la vida de Yona, si no se hubiese exiliado? ¿Qué hubiese pasado si Soo-Won hubiese sido el expulsado?
R: Siento decir que nunca he pensado en hacer eso; que Soo-Won decidiese exiliarse. La escena del asesinato del padre de Yona (Iru) era necesaria para la trama; tenía que pasar sí o sí. Entonces, aunque Soo-Won se hubiese exiliado, seguro que hubiese vuelto para seguir con su plan. El futuro no habría cambiado. Sin esa parte de la historia tan importante, ella no habría crecido como persona, saliendo de su zona de confort.
P: En las diversas redes y medios online, Yona se presenta al público como un suricato (pequeño mamífero africano), así como el resto de su familia. ¿Por qué lo hace?
R: No hay ninguna explicación muy concreta. Creo que es porque todos los miembros de mi familia son muy bajos de estatura. Creo que indirectamente acabé plasmándolo en mis diseños, dado que era la imagen que tenía en mi cabeza.
P: ¿Cuál es su personaje favorito de Yona, princesa del amanecer? ¿Con cuál te cuesta conectar más? ¿Por qué?
R: Todos son personajes que yo he creado. No me gusta particularmente ningún personaje, en sí mismo. Pero, en ocasiones presto especial atención a alguna persona, porque dibujarla me produce una sensación especial, es como que estoy deseando verla (en la escena), y quiero que la historia la siga. No podría responder a cuál me gusta, pues mi personaje favorito sería aquel que me cause esa sensación al dibujarlo, en ese preciso momento.
Y bueno, es difícil no establecer una conexión con alguno de ellos. Pero sí me siento especialmente responsable al dibujar a Yona y Hak, porque pueden ser personajes difíciles. Ellos definen mucho la historia, y quiero hacerlo lo mejor posible. De este modo, a veces paro, porque temo equivocarme. En definitiva, siento esa especial dificultad y presión a la hora de dibujarlos, porque debo llevar mucho cuidado.
P: ¿Qué le resulta más difícil, dibujar personajes masculinos o personajes femeninos?
R: Como los hombres son generalmente personajes más rudos, las lectoras suelen perdonar algunos fallos en su diseño. Pero, el público mira mucho los detalles de las mujeres. Es más difícil que les guste un personaje femenino, porque son más estrictos con su dibujo. Esto lo hace más difícil para mí, así que soy más estricta con ellas también.
P: Los cuatro dragones son muy diferentes entre sí, ¿en qué se basó para su diseño? ¿Cuál es su favorito?
R: El cuatro es un buen número. Dijimos que uno debería ser ligón o nampa (軟派), otro debería ser tímido, otro debería ser travieso, y otro debería tener gafas. Pero en esta época (periodo de los Tres Reinos de Corea, o siglo IV d.C.), no podíamos poner un personaje con gafas; era una lástima. Así que nos quedamos con esos patrones para los personajes.
Y me gustan todos los dragones, les tengo mucho cariño, así que se me hacen fáciles de dibujar. Quizá destacaría a Kija, por ser positivo y simpático. Es fácil de dibujar, también (quizá porque destaca su color blanco), y con él puedo crear historias divertidas.
P: Yona, princesa del amanecer forma parte del género de ciencia ficción o fantasía, pero no es común en el shōjo. ¿Por qué decidió hacer un manga shōjo de ciencia ficción, en concreto?
R: En Japón existen mangas con protagonistas femeninas en mundos de ciencia ficción; especialmente en la editorial o compañía japonesa Hakusensha (白泉社). Sobre todo mi objetivo era crear una chica que se hace fuerte y crece por sí misma.
P: ¿Cuál de las versiones o diseños de Hak es su favorito?
R: Sus diseños son algo diferentes, sí. Pero prefiero el Hak que me es más fácil de dibujar. Cuando estoy dibujando a Hak bromeando con amigos, o cuando está con su familia (como su abuelo). Me siento a gusto con ese Hak, sea cual sea su ropa o diseño.
P: ¿Es la primera vez que visita España? ¿Le gustaría ir a algún sitio en particular?
R: Sí, es la primera vez que vengo a España, también a Europa. Me gustaría ver alguna ciudad histórica, si tengo tiempo. Mientras aterrizaba el avión, pensaba lo bonita y diferente que era este lugar; aunque solo he visitado los alrededores del Montjuïc y la Plaza de toros de las Arenas. Además, me gustaría visitar el MNAC (Museu Nacional d’Art de Catalunya), porque me parece precioso. En general, desde que he aterrizado han ido creciendo mis ganas de ver más sitios de España.
P: Ao-chan es la mascota del grupo, y tiene mucho protagonismo. ¿Cómo se le ocurrió?
R: No podía poner un animal demasiado grande, sino un animal que pudiese poner cómodamente junto a los protagonistas. Además, cuando la historia se hace muy dura o seria, me gusta utilizar a Ao-chan para suavizar el golpe.
Agradecemos a Mizuho Kusanagi su visita al 25 Manga Barcelona y que nos concediera esta entrevista conjunta con diversos medios. Esperamos que haya disfrutado de su estancia.
Fuentes:
- Preguntas realizadas por Ramen Para Dos, Mision Tokyo, Anima, Akihabara Station
- Entrevista realizada y redactada por: Anaís Medina, Estel·la Ramírez