Siempre se ha considerado que la sociedad japonesa como un colectivo uniformado. Sin duda, nos han ofrecido una imagen de una sociedad en la cual no existe la diversidad. Por lo tanto, no deja de ser una comunidad que tiende a la homogeneización. Pero si rasgamos esta aparente superficialiad, la realidad esconde una profunda diversidad.
Si continuamos investigando podemos encontrar en el fondo esas pequeñas diferencias, pero para ello necesitamos un proceso de entendimiento y de contextualización. Aquello que a simple vista parece homogéneo, en realidad esconde una heterogeneidad muy concisa. Por lo tanto, podemos encontrar un marco referencial homogéneo muestra que en su interior una individualidad dentro del colectivo. Este hecho ya fue identificado por Nakane Chie en su obra Japanese Society en 1973.
El concepto de uchi y soto como base del colectivo sociocultural japonés
Como ejemplo de este tipo de homogeneidad la podemos observar en los llamados salaryman (サラリーマン). Este grupo representa la gran clase media japonesa surgida tras la recuperación de la II Guerra Mundial. Su nombre nos recuerda de una manera más literal a los llamados «asalariados». Precisamente, esta palabra, a su vez, nos evoca al «proletariado» definido por Karl Marx definió en el Manifiesto Comunista. Pero, esta interpretación no es más que un simple espejismo. No deja de ser una visión soslayada de la realidad japonesa en la que todos son «iguales».
Ciertamente, sí que existe una individualidad, pero sólo se observa en los pequeños detalles, como la edad, la jerarquía, la posición económica… Precisamente, el japonés medio siempre estará por debajo o por encima de otra persona ocupando el lugar que le corresponde dentro del colectivo social.
El lugar que le corresponde fue definido por la antropológa Ruth Benedict en su obra titulada El crisantemo y la espada. En esta obra se definió la sociedad japonesa como una sociedad grupista donde primaba el grupo antes que el individuo. Por otro lado, no podemos olvidar que un japonés realiza una diferenciación entre su círculo privado y su círculo propio. En japonés esto está definido por la terminología de uchi (ウチ), «lo interior», «lo propio», «lo privado». En contraposición tenemos «lo ajeno», «lo externo», «lo público», es decir el soto (ソト).
Uchi y Soto como base conceptual de «lo propio» y «lo ajeno»
La afirmación que «los japoneses son un colectivo» es una teoría cultural que se particulariza notablemente bajo las teorías del «nihonjinron«. Bajo esta premisa se podría afirmar que carecen de una conciencia del denominado yo individual. Además, la propia estructura social japonesa ha promovido esta ideosincracia para mantener la armonía social. Por lo tanto, esta forma de colectivismo basada en diferentes investigaciones, se ha sustentado en la psicología, sociología y la antropología cultural.
Aunque también no se ha dejado de lado los estudios del lenguaje del japonés. Esta lengua también ha sido estudiada para comprender la particularidad conceptual de «lo público» y «lo privado», es decir, el uchi y el soto en relación a «lo propio» y a «lo ajeno».
Estructura de la teoría colectivista y unitaria
Precisamente, la construcción de esta crítica mantiene una estructura clara:
- Se generaliza este estereotipo tanto en los estudios del idioma y en los modelos culturales de la sociedad.
- La premisa inicial es ofrecer un aspecto generalizado del pensamiento que es mutable a través de la propia construcción del lenguaje.
- Para ello se practican estudios sobre los concepts de uchi y soto y su significado dentro de la lengua y de la sociedad que se vertebra sobre ella.
- Los resultados obtienen unos valores absolutos al entender estos conceptos como universales del objeto del estudio lingüístico.
- Finalmente, se obtienen conclusiones. Por lo tanto «lo propio», «lo privado», será lo contrario a «lo público» y «lo externo» que va del sujeto hacia la sociedad, del uchi hacia el soto. De esta manera se podrá formular y realizar una sistematización de lo que es la centralidad social y como ésta se representa en la lengua siendo «lo propio», «lo individual» como el elemento discordante dentro de la armonía social que se opone al esquema del modelo grupal y a la imagen que se tiene de los japoneses en la actualidad.
Fuentes:
- Textos consultados: Berkeley University; Nakane, Chie. (1973). Japanese society. Middlesex: Penguin Books Ltd. Harmondsworth; Benedict, Ruth (1944/2004). El Crisantemo y la espada. Barcelona: Alianza Editorial. | Texto escrito por: Sergio Paterna [CoolJapan.es]
- Imágenes extraídas de: Wikipedia