Saitama es una de las prefecturas limítrofes con Tokio, a solo 40 km de la capital de Japón se extienden campos de arroz, valles, ríos y pequeñas colinas que hacen olvidarnos de la bulliciosa vida de la ciudad. Pese a que Saitama cuenta con una larga historia e identidad propia, muchas de las ciudades y pueblos que la componen suelen utilizarse como zonas dormitorio o residencial por los urbanitas. No es de extrañar dado el clima de paz y naturaleza que se puede respirar en Saitama. Yoshikawa una de estas ciudades de la prefectura de Saitama que con poco más de 31 km cuadrados, tiene más de 70.000 habitantes, y a pesar de ello, en ningún momento se forman aglomeraciones. Está muy bien comunicada y se puede llegar por la línea JR East así como las líneas Musashino y Jōban. Aunque también existen combinaciones con líneas express y privadas, cualquier portador del Japan Rail Pass puede moverse con toda libertad por Saitama, y también llegar a Yoshikawa.
El área que hoy ocupa perteneció a la antigua provincia de Shimōsa durante el periodo Edo (1603-1868), siendo un territorio tenryō, gobernado directamente por el bakufu Tokugawa por medio de samuráis de alto rango o hatamoto. En 1889, Yoshikawa estableció su primer gobierno civil, y con la adhesión de las aldeas de Asahi y Miwanoe en los años siguientes fue creciendo hasta conseguir la categoría de ciudad en 1996. Hoy en día Yoshikawa es una ciudad moderna que dispone de todo tipo de facilidades para sus ciudadanos.
Cualquier persona que visite Yoshikawa, verá en cada esquina la figura de un pez gato llamado namazu. Este pez es al mismo tiempo meibutsu o comida típica, mascota y protector de la ciudad.
El namazu, traducido por pez gato, aunque similar a nuestro siluro, es un animal sumamente importante en la mitología shintō. Este tipo de peces habitan en los fondos de los ríos y pantanos, rebuscando en el fango la comida y escondiéndose bajo formaciones rocosas. Según la leyenda shintō, un gigantesco namazu vive bajo las islas Japón, y de vez en cuando, le gusta zarandearse de un lado a otro, provocando grandes terremotos en las islas del archipiélago nipón. Para evitar el sufrimiento de los habitantes de las islas, los Kami, decidieron enviar a la divinidad Kashima myōjin, también llamado Takemikazuchi no Mikoto 建御雷命, una divinidad vinculada a las tradiciones guerreras.
En el Kojiki, texto que compone la génesis mitológica de Japón, compuesto en el año 712, se relata como el kami Takemikazuchi venció a Takeminakata en lo que considera la primera muestra de un combate de sumō. Debido a la fortaleza de esta divinidad, no es de extrañar que fuera la elegida para aplacar al enorme namazu. De esta forma, el dios de Kashima se arrojó desde los cielos con una gran roca, aplastando al namazu, inmovilizándolo, aunque sin matarlo. Sin embargo, con el paso del tiempo, los seres humanos dejaron de rezar a Takemikazuchi para que sostuviera estoicamente la piedra, y al no escuchar las plegarias, entraba en un estado de aburrimiento, que le llevaba a quedarse dormido. En el momento en que el kami se duerme, el namazu aprovecha para zarandearse y provocar terremotos, hasta que el movimiento también despierta al dios, y vuelve a retener al gran pez.

Esta relación entre este pez y los terremotos rebasa la leyenda, puesto que gracias a sus largos y sensibles bigotes, los namazu pueden detectar los temblores antes de que sucedan, previniéndolos con un zarandeo semejante al que realiza el gran namazu que provoca los seísmos.
Los ríos Edo y Naka cruzan la ciudad de Yoshikawa y en ambos se pesca el namazu, cuando es su temporada. En el despacho de reuniones del alcalde de Yoshikawa, también una pecera con un namazu. También, en las tapas de las alcantarillas, y los pivotes y bolardos de la calle, está impresa su figura o la de Namarin, un kawaii carácter donde una jovencita namazu anima a visitar Yoshikawa.
Frente a la estación de Yoshikawa, también hay un monumento al namazu realizado en urushi makie o técnica de laca japonesa y polvos de oro. Esta obra de arte, acerca a España con Japón en tanto que el autor es Murose Kazumi, ningen kokuhō o tesoro viviente, que ha venido en tres ocasiones a España a impartir seminarios sobre urushi o laca japonesa.
Contando este verano de 2018, ya son tres veces las que acudo a Yoshikawa, y es que además de lo dicho, está ciudad tiene un tesoro oculto. Se trata de la residencia de Shimizu Nobuko, líder de la escuela Ryōen ryū naginatajutsu. Tras haber asistido a entrenamientos en la bonita ciudad, decidí organizar por primera vez en la historia, un seminario de Ryōen ryū naginatajutsu en Yoshikawa. Este campamento de naginata se celebró los días 13, 14, 15 y 16 de agosto de este año. Desde España nos desplazamos 5 personas, para compartir experiencias en el país fuente de origen de las artes marciales que practicamos y aprender todo lo posible de la maestra Shimizu Nobuko.
Este curso, sirvió además para estrechar lazos entre España y Japón, ya que fue inscrito en la lista de eventos de la Embajada de Japón en el 150 aniversario del inicio de las relaciones diplomáticas entre España y Japón, bajo el nombre de: «la naginata: un puente entre España y Japón». Para oficializar el acto, se organizó una recepción en el ayuntamiento de Yoshikawa. A esta visita cultural asistieron varias autoridades de la ciudad: la Directora de la División de Promoción para la Participación Ciudadana, Aikawa Misako; el Director de la Yoshikawa International Friendship Asosiation, Higuchi Keiichi; el Jefe de la Unidad del Departamento de Comercio, Industria, Turismo y Desarrollo Industrial; Shibata Morihiko; el Manager de la División de Promoción para la Participación Ciudadana, Kobayashi Chi; y el Empleado Responsable de la División de Promoción para la Participación Ciudadana: Katagiri Shunsuke, así como el Presidente de la Inmobiliaria Yoshikawa Minami: Ishii Akihide. Tras recoger los dosieres sobre Yoshikawa que habían dispuesto en nuestros asientos, llegó el turno de presentarnos todos, momento donde la maestra Shimizu Nobuko me encomendó realizar en un pequeño discurso, los detalles culturales y diplomáticos de nuestro viaje. Siguieron unos videos explicativos sobre la ciudad, y una presentación de cada una de las autoridades, hablándonos de su trabajo en Yoshikawa. Finalmente, la maestra Shimizu Nobuko tomó la palabra para pronunciar un discurso de alabanza a las actividades físicas que avivan el cuerpo y el espíritu, y que aúnan la cultura y el arte bajo una misma escuela. Shimizu sensei, cantó alabanzas a la naginata, como un nexo o puente que ha permitido que dos zonas tan lejanas como España y Yoshikawa se conecten. Tras finalizar los parlamentos, iniciamos una visita privada por todas las oficinas y dependencias del ayuntamiento de Yoshikawa, destacando su nuevo salón de plenos. Como evento final, en el auditorio del Oasis Koryū Center de Yoshikawa, el día 16 de agosto, a las 19h realizamos un enbu o demostración de Ryōen ryū naginatajutsu. Toda esta visita, quedó recogida por las RSS del ayuntamiento de Yoshikawa, así como por el periódico que allí se edita.
Ya sea por su situación rural y alejada del bullicio de Tokio, por sus namazu, por la presencia de Ryōen ryū naginatajutsu, o por la amabilidad y gentileza de sus habitantes, la ciudad de Yoshikawa, en la prefectura de Saitama, os invita a todos a visitarla.
Fuentes:
- Texto creado por: Marcos A. Sala Ivars [Cooljapan.es ]
- Imágenes de: Marcos A. Sala Ivars [Cooljapan.es], Ayuntamiento de Yoshikawa y Creative Commons Wikipedia.